¿Qué Hacer si mi Hijo es Quien Hace Bullying?

18 Out of 100 People

According to the National Institute of Mental Health, anxiety disorders such as PTSD, panic attacks, phobias, and general anxiety disorder affect 18% of people in the U.S. each year, making them the most common mental health problems.

Anxiety becomes an anxiety disorder when overwhelming fear and worry prevent you from being able to live a normal life. Anxiety disorders can affect anyone and may begin at any age.

People with anxiety disorders are unable to control their own disturbing thoughts. They may start to avoid everyday situations that they fear will trigger more stress.

Anyone in Ventura County who has a question about mental health should seek help immediately, the same way you would ask for help when we have any other health question. If ignored and untreated, extreme anxiety can prevent you from being able to participate in daily life.

Worrying, Anxiety and When It’s Too Much

Everyone experiences worry in some way during daily life. You may feel understandably anxious as a reaction to ordinary urgent situations, for example, if you are running late for work. However, you may also feel anxious when you are worrying about something that may or may not happen, a threat that only exists in your imagination.

“Su hijo es el acosador” son cinco palabras que usted no quisiera escuchar y es posible que su primer instinto sea negarlas. Sin embargo, para intervenir y cambiar comportamientos de intimidación es esencial la participación de los padres. Confrontar esta conducta de inmediato será importante para su hijo y para los niños que su hijo acose. Los niños que acosan están tienen un alto riesgo de adoptar otros tipos de conductas peligrosas.

Con frecuencia el comportamiento agresivo comienza temprano en la vida del niño. Aunque es normal que los niños den golpes, peleen y discutan entre ellos, la mayoría aprenden a controlar estos impulsos. Usted puede ayudar a que su hijo entienda que sus palabras y acciones afectan a los otros. Usted desempeña un papel importante en hacer que su hijo tenga consciencia de los sentimientos de los demás.

Puede que usted oiga por algún padre o alguien de la escuela que su hijo se ha estado comportando agresivamente o quizás note algunos cambios en la conducta de su hijo. Es posible que su hijo esté acosando a otro niño si:

  • Viene de la escuela con dinero extra o juguetes, libros o ropas "nuevas".
  • Es cruel o malo cuando habla de otros niños, por ejemplo, si los insulta con otros nombres.
  • Excluye a otros niños de participar en actividades.

Si usted ve o escucha cualquier comportamiento descrito, haga algo.

Recurso Local

Si usted sospecha que su hijo(a) está siendo acosado(a), busque ayuda inmediatamente:

  • Dígale a un maestro, empleado de la escuela o terapeuta.
  • Fomente la comunicación con su hijo(a).
  • Contacte a organizaciones en su comunidad, grupos de apoyo u otros padres de familia.

Ver los recursos en la Oficina de Educación del Condado de Ventura (en inglés).

Los recursos incluyen la justicia restaurativa, que brinda procedimientos para hacer responsables a los estudiantes de sus acciones y comportamiento, creando a la vez un ambiente escolar enriquecedor.

LO QUE PUEDE HACER

  • Hable con su hijo. Escuche con calma y abiertamente su razonamiento y explicación ante su conducta. Hágale preguntas para saber lo que ocurre en la vida de su hijo. Quizás esté siendo víctima de acoso y se desquita en otros niños. O puede que su hijo aún no sepa lo importante que es entender los sentimientos de los demás.
  • Ayude a su hijo a entender cómo su comportamiento lastima a otros niños.
  • Establezca de forma clara las consecuencias de ese comportamiento agresivo; por ejemplo, la pérdida de privilegios, y dígale bien claro que el acoso es algo inaceptable. Puede ayudar a su hijo si establece reglas, supervisa sus actividades y le brinda un buen ejemplo. Controle su ira y demuestre sensibilidad y respeto por los demás.
  • Sea un ejemplo de comportamiento no violento en su hogar; no castigue a su hijo mediante la fuerza física, como las nalgadas. El castigo físico sólo refuerza la idea de que la gente puede obtener lo que quiere mediante la agresión.